Los misterios de nuestro universo, son una intriga para mucho, y pudiera representar una guía y verdad para otros. La numerología intenta hacerse cargo de estos misterios, y brindar esa guía que muchos buscan para darle rumbo a su vida, en distintos aspectos que se les presentan, como una constante o simple casualidad que pudiera ser la respuesta definitiva a un camino que buscan.

De esta forma, intentaremos revelarte un poco sobre los misterios que posee el número 18. Un número que según los históricos, se encuentra relacionado con la totalidad y considerado como uno de los números sagrados. Si resulta que has descubierto que este es tu número, te hablaremos un poco más sobre su significado en este artículo, lo cual pudiera permitirte conocer un poco más a cerca de ti mismo.

¿Qué significa el número 18 en numerología?

En la numerología, el número 18 representa un interés universal. Es símbolo de espiritualidad y fortaleza interior. Representa la luz interna y brilla con la pasión de los sueños y deseos de la persona que nace bajo este número. Es un número que vive por su propia independencia y libertad. No puede ser controlado ni domado por nadie, pero sin duda, muestra una gran compasión y afecto hacia los demás.

Es un genio artístico, y se dejará conocer por su propia creatividad. Tiene una gran facilidad para perdonar los errores de otros, a pesar de esté seguro que estos se encuentran en el error. Hará lo posible por iluminarles y guiarles por el buen camino, por el bien de conservar amistades y llevar a todos por el buen camino.

Son autosuficientes al estar compuestos por el número 8, y su naturaleza compasiva, proviene de la suma de sus dígitos, formando el número 9. Debido a esto, pudiera resultar un poco obsesivos con el trabajo, pero mantienen el equilibrio de preferir mantener sus relaciones y amistades en una buena posición. Se esforzarán en lo posible por el cumplimiento de sus metas y de alcanzar el éxito, pero esto sólo será de verdadero valor para ellos si pueden conservar a quienes quieren a su lado.

significado del numero 18

Al tener una mezcla del 1 y el 8, el número 18 cuenta con una gran autosuficiencia y capacidad de conseguir todo cuando se lo propone y como se lo propone, por lo que se caracteriza por siempre darle cierre a sus ciclos.

Entre algunas curiosidades, el número 18 en el Tarot, es el número que corresponde a la carta de “La Luna”, la cual simboliza el final del camino, donde la presencia de la luz es la salvación. Esta carta pudiera significar una prueba final, el cual sólo podrá ser superado si se tiene la suficiente voluntad, fuerza y coraje, y es un camino que deben atravesar solos.

Igualmente, si hablamos del resultado de la suma de ambos dígitos, obtenemos entonces el 9, que en el Tarot nos habla de la carta del “Ermitaño” o “Viejo sabio” que simboliza entre varios aspectos a la discreción.

El 18 y su lado negativo 

En lo negativo, el número 18 puede tener tendencias egoístas, por su deseo del éxito y la gran influencia del número 1 que también corre peligro de caer en las mismas. Esto se debe también a su tendencia individualista, y la capacidad que tiene por conseguir todo lo que se propone por sus propios medios, deberá ser educado en la luz, para que descubra la voluntad de compartir sus éxitos y logros con el mundo, antes de conservarlos para sí mismo.

Ventajas de identificarse con el número 18

 Una de sus importantes cualidades es su fortaleza interna, su valentía y su autosuficiencia. Tiene una gran ambición y es difícil desanimarlo en sus objetivos. En cuanto a su significado positivo, este número pudiera representar esa luz que necesitamos en la adversidad, la cual nos acompañará en lo que queda de camino, como muestra de que no estamos solos y que falta poco para alcanzar nuestro objetivo.

Sin duda el significado del número 18, nos habla de un número poderoso y mágico. Será conveniente tenerlo presente ante la adversidad, pues pudiera ser el motor necesario que nos dará la motivación que buscamos para enfrentar los problemas que se presenten, y dejarnos envolver por su luz, para así conseguir nuestra propia iluminación espiritual.